Aunque parezca mentira, la de Harry de Inglaterra y Meghan Markle no ha sido la única boda de la semana. El pasado martes, también en Reino Unido, contraían matrimonio Cesc Fabregas y Daniella Semaan, después de siete años de relación y tres hijos en común.
Su relación no empezó precisamente de forma tranquila, ya que ella estaba pasando por un tormentoso divorcio con el libanés Elie Taktouk, que acusó al futbolista de haberse metido en medio. Pero olvidados los problemas, la pareja ha puesto la guinda a su historia de amor con un enlace íntimo, al que asistieron solo unos pocos familiares y amigos.
Y tras la boda, ha llegado la luna de miel, aunque es un tanto atípica. No han elegido un destino alejado y paradisíaco, sino que se han ido hasta Ibiza, su lugar favorito de vacaciones. Y lo han hecho, además junto a sus hijos, que se han convertido en los protagonistas de estos días de vacaciones.
Precisamente, el jugador del Chelsea se entregó a los juegos en la arena, muy pendiente de sus dos hijas mayores, Lia y Capri. Mientras, Daniella observaba desde el chiringuito, en el hotel Nobu, propiedad de Robert de Niro. Como es habitual en ella, la libanesa lució ropa ajustada y muy escotada, un estilo al que ha sido fiel hasta en el día de su boda, cuando lució un escote más que generoso.
La familia va a tener más vacaciones de las que tenían planeadas en un principio, ya que Cesc Fábregas no ha sido llamado por Lopetegui a las filas de la Selección Española.
Ahora, queda en el aire si el futbolista dejará el Chelsea y fichará por otro equipo. Son fuertes los rumores que le colocan en el Valencia, por lo que no habría que descartar tener de nuevo en España a toda la familia Fábregas – Semaan, donde estarían además, muy cerca de su amada Ibiza.
