Joana Sanz hace su primera aparición en un programa televisivo en el estreno de ‘¡De viernes!’. La modelo comparte su versión después de que la fiscalía solicite nueve años de prisión para su esposo, Dani Alves, por agresión sexual.
Joana revela que, a pesar de haber solicitado el divorcio inicialmente, siguen casados porque él se negó a concedérselo. Afirma que, por ahora, no tienen planes de divorcio y continúan en la situación actual.
Al ser cuestionada sobre su convicción de mantener el matrimonio, Joana comenta que él le dijo que hiciera lo que quisiera y que no le daría el divorcio. A partir de esa conversación, decidieron mantener su estado civil actual.
Joana comparte que sigue apoyando a su marido y que mantienen una comunicación regular por teléfono, ofreciéndose apoyo mutuo en medio de la situación. Destaca que, a pesar de todo, sigue enamorada del futbolista y subraya que el amor persiste independientemente de su estado civil, ya que él es su familia. Deja en manos del tiempo el rumbo de su relación.