En su entrevista en ‘¡De Viernes!’, Maite Galdeano comenzó con una confesión sincera: «Estoy muy mal». La navarra expresó su tristeza por la complicada relación que mantiene con su hija, Sofía Suescun, y no dudó en criticar duramente a Kiko Jiménez, revelando una intensa discusión entre el andaluz y la influencer.
Durante su intervención, Galdeano reconoció su parte de responsabilidad en el distanciamiento. «Siento pena y tristeza si he fallado. Espero que Sofía me escuche y me llame. Me encantaría. Es normal que pida tiempo. Entiendo que le he podido agobiar. Quizás he sido una madre demasiado intensa y me he involucrado demasiado en su relación, siempre sin intención de hacer daño».
La versión de Maite Galdeano sobre su distanciamiento con Sofía Suescun señala que la participación de Sofía en ‘Supervivientes All Stars’ fue un punto clave en la disputa familiar. Según Galdeano, dos días antes de que la influencer partiera hacia Honduras, tuvo un enfrentamiento con Kiko Jiménez. «Cuando se fue al aeropuerto, le envié un mensaje a Sofía», reveló Maite. En el mensaje, le aconsejaba: «Deja a ese imbécil que jamás te hará feliz. No se quiere ni a sí mismo. Cada día me da más asco. Tu alma y sentimientos no son para él. Te amo».
Galdeano admitió que lamenta haber enviado ese mensaje. «Él aprovechó la situación para ir a Honduras y hablar mal de mí, enseñándole el mensaje. La puso en la situación de elegir entre su madre o él», aseguró.
Maite también relató que fue testigo de una fuerte discusión entre Kiko y Sofía tras el regreso de esta última a Madrid. Según su relato, Kiko le recriminó su participación en el reality con duras palabras: «¿Para qué has ido ahí? ¿No te das cuenta de que quedaste como la p*** de España?». Ante esto, Galdeano intervino y le preguntó a Sofía si le parecía aceptable la actitud de su novio. «Eso es una humillación», afirmó.
A partir de ese momento, los acontecimientos se precipitaron. Según Maite, se organizó su salida de la casa con la ayuda de su hijo, Cristian Suescun, quien le pidió que se trasladara unos días a Murcia. Posteriormente, regresó a Madrid, donde incluso saltó la valla del chalet de Sofía. «Estoy desvalida, enferma y perdida. Así me destruyen. No tengo a nadie. Espero que se pongan en mi lugar», expresó.
Muy arrepentida Maite reconoce parte de sus errores y propone como solución una terapia conjunta con Kiko, Sofía y su hijo Cristian.
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Su objetivo es recuperar la relación con Sofía cuanto antes. «Estoy desesperada y desubicada. No entiendo este castigo tan severo. Admito que he echado leña al fuego. He visto cosas que no me gustaron respecto a mi hija, y reconozco que me he involucrado demasiado en su vida. No ha sido la manera correcta. Claramente, no ha sido inteligente de mi parte, y he perdido la batalla. Lo he hecho muy mal».
En cuanto a su salud mental, Maite fue clara al afirmar que no sufre problemas psicológicos. «No los tengo. Cualquier divulgación de mis datos médicos es un delito grave. Me han dicho que están difundiendo mi informe psicológico en Telecinco, lo cual es un delito muy grave», concluyó.
