La Reina Sofía pudo celebrar en Zarzuela su 80 cumpleaños con un gran almuerzo en el que reunió a prácticamente toda su familia y en el que, por primera vez desde 2011, estaban todos sus hijos. Ese encuentro nos ha dejado una fotografía para la historia y que hace algunas semanas era impensable que se hiciese realidad.
Una foto histórica por los protagonistas y por el posado en sí: solamente la Reina Letizia y su hija la Princesa Leonor están agarradas de la mano y los demás ni se rozan entre sí. Por otro lado, Pablo Urdangarín sale con los ojos cerrados y la pierna derecha del Rey Juan Carlos está torcida debido a sus problemas de movilidad.
La Reina Letizia nunca deja nada al azar y todo lo que ocurre en la Casa Real está controlado al milímetro por ella. Quizás existiese una fotografía mejor a la que se ha publicado pero la encargada de dar el visto bueno a las cosas que se envían a los medios decidió que esa la mejor. ¿Quién es la encargada? Letizia.
Según cuenta El Español, la verdadera razón de publicar esta imagen, y no otra, tiene otro sentido. Al parecer, la intención de la Reina Letizia era ‘vengarse’ del rey emérito y dejarlo en evidencia ya que la pierna derecha del monarca no está recta ya que él mismo se negó a aparecer con el bastón o sentado.
La situación física del Rey Emérito cada vez está peor y le cuesta andar, no pudiendo prescindir de su bastón. Pero él fue el que no quiso salir con el bastón y ese fue el resultado: «Aunque él se empeñara y no quisiera aparecer con el bastón, la foto es una mala jugada para El Jefe. Se ve claramente que le ocurre algo en la pierna», aseguran.
Como bien es sabido por muchos, la Reina Letizia es la encargada de elegir el material que se envía a los medios de comunicación: «Al final, la que decide qué foto se manda a los medios es ella y podría parecer que lo hace aposta para que todo el mundo vea cómo se encuentra su suegro«, ha comentado una fuente cercana del Monarca al citado medio.
